Texto y fotos: Manuel Chun

De pocas palabras y seguro de sí mismo, Ángel Gabriel Enríquez Franco emerge en el squash guatemalteco, por ello es el protagonista de esta entrevista, la cual compartimos con ustedes amigos del boletín Pasión por Guatemala.

Su talento con la raqueta y la bola de goma pertenecen a una dinastía envidiable en este deporte, el cual cuenta con sus hermanos como grandes referentes y donde busca escribir su propia historia.

2006

Ángel nació un 5 de enero de 2006, para integrar la familia Enríquez. Sus padres, Erwin y Miriam, lo impulsaron a ser parte del squash. “Han sido importantes. Mi papá es quien más me ha animado”, confiesa el atleta que practica este deporte desde los 6 años.

Dinastía

“El squash lo conocí por mis hermanos; los veía viajar y competir a nivel internacional y eso me motivó, entonces, le pregunté a mi papá si me podía inscribir y así fue como empecé”, expresa Ángel, el menor de los Enríquez, y quien se inspira en sus hermanos Alejandro y Josué, quienes han conquistado importantes glorias para nuestro país a nivel nacional e internacional.

El Salvador

Su primera competencia fue en el 2017, cuando intervino en el Torneo Internacional Squash Para Todos en El Salvador. Una medalla de oro en la categoría Sub 13 fue su primera conquista. “Me emociona mucho jugar, más cuando represento a Guatemala”, confiesa.

La pandemia

Ángel afrontó el cambio originado por la pandemia del COVID-19 y se adaptó a las necesidades. “He recibido instrucciones de los entrenadores por Zoom y nosotros les enviamos videos de nuestras rutinas por Whatsapp”, indica.

Sin embargo, pronto estará de vuelta, luego de que se autorizó retomar los entrenos controlados para atletas priorizados. “Acá, en casa, no tenía espacio para realizar ejercicios con la raqueta, eso dificultó estar en ritmo”, expresa el atleta de 14 años.

Aprendizaje

Su última experiencia en cancha fue en el Campeonato Sudamericano Juvenil en febrero pasado, en Quito, Ecuador. “No me fue bien, pero aprendí mucho, porque hay un nivel exigente”, cuenta Ángel, quien ahora compite en la categoría Sub-15, en la que le gustaría ser el campeón nacional.

No obstante, antes de la pausa deportiva por el COVID-19, sus resultados fueron favorables en el primer y segundo Ranking Nacional, con un oro y una plata en la categoría B y en Open Junior Masculino, respectivamente.

Talento

Su futuro es prometedor, por ello, el Programa de Retención de Talento de CDAG lo ha apoyado por más de dos años, tanto a nivel deportivo como personal. “He adquirido conocimientos en los diferentes talleres a los que he asistido; me ha servido para realizar un buen trabajo en equipo, como cuando juego en dobles. También compañerismo y a tener un plan de vida”, resalta el juvenil.

Objetivo

“Me encantaría llegar a ser el mejor representante de Guatemala en el squash y continuar con los triunfos como mis hermanos; además, continuar conociendo atletas de otros países”, fueron las palabras finales de Ángel, quien es parte de la nueva camada del squash guatemalteco junto a Tabita Gaitán, Darlyn  Sandoval y  Sebastián Fonseca, a quienes considera grandes amistades.